Querida Cristian, comparto contigo esa mirada de desencanto. Ahora mismo ni lo virtual ni lo «real» ayudan a la creación literaria. Tenemos que ser fuertes y creer más. Es un tiempo malo para cualquier iniciativa donde solo emerga lo artístico y no remunerado. Creo que es un momento estupendo para estar más unidos y crear nuestros propios dispositivos de lectura y amistad. Si Murcia es un desierto, Barcelona, que siempre presumió de una vida cultural rica ya animada, ahora mismo también languidece en las garras del turismo y las ferias internacionales de cualquier cosa. No podemos irnos a parte alguna porque el mal está hecho. Ya no hay críticos que se interesen por lo que hacen los jóvenes, qué vamos a esperar de ellos.
Poetas en la red 
Has hecho una puntualización muy buena y que según veo comparten Murcia y Barcelona: la Cultura se ha sustituido por el Turismo. Concretamente en Murcia, la actual Consejería abarca ambos temas, Cultura y Turismo, pero todo su presupuesto y su gestión se limita al Turismo. Ahora mismo sólo hay ferias, conciertos pop y festivales que traen mucho público de fuera, pero nada dedicado a infraestructuras o eventos de creación cultural.
Respecto al otro punto de tu post: lo de luchar, persistir… ¿a qué precio? casi todas nosotras tenemos nuestro trabajo de 8 o 9 horas normal (más o menos normal), y además leemos y escribimos. Llevamos nuestro hogar también y queremos descansar de vez en cuando (¡descansar! ¡qué capricho más raro!!) yo ya tengo 45 años, no tengo hijos ni casa ni nada. ¿qué más tengo que sacrificar? ¿Qué más quiere de mí este mundo en el cual quiero trabajar, en el cual siento que tengo muchas cosas que decir?
Me siento sola y cansada.
A mi me parece que estamos actualmente entrando la era posdigital. Es decir, una era en que empezamos que aprender que el atención es un recurso limitado. La promesa digital era que podrimos tener todo info inmediatamente y el precio era un responsabilidad eterno. El Wikipedia, me parece un fenómeno paradigmático en este sentido. Todo el mundo puede añadir info, y todo el mundo es responsable por el info. El problema es que nuestras vidas son limitadas. Tanto el deseo de informar como la obligación de responder están consumiendo la atención limitada que cabe una vida. Si estamos ocupados con corectar el Wiki o con el Facebook o con escanear la red por info no podemos además leer der vera un poemario (electrónico o en papel). Hay aquí un conflicto agudo en cada vida. Yo creo, sin embargo, que empezamos ahora ahogar mejor con nuestros recursos limitados de atención. Que, mejor dicho, hemos mejorado en economizar la atención.
La poesía es “la arte del atención lingüístico”. La poesía depende en términos absoluto de la atención de lector. Por eso el sentido de depresión poético en esta plena crisis de atención. Pero de mi punto de vista la gente esta reconquistando ( o tal ves recuperando) actualmente el conocimiento que la vida es corta y el mundo inmenso. Hay que elegir. Y seguramente, otra y otra vez, eligiremos la poma, el poemario, la poesía.
Tal vez estamos en el fin de una era muy deprimido para la poesía. Pero “my beginning is my end” como dice Eliot. Los últimos días además son los primeros. Para mi es evidente. La era posdigital ha venido, la era en que cultivaremos el arte de atención bajo el conocimiento que estamos mortales y limitados. Un rayo, de nuevo – la aurora.
/Magnus William-Olsson